‘700 EVANGELIOS ORIGINALES’ está escrito con el estilo bienaventurado del hijo que conoce personalmente al Padre Bondadosísimo. El corazón, colmado de júbilo y estremecimiento extático por Su belleza superante, derrama aquí misteriosas letras de oro, y las páginas exhalan el aroma del amor del hijo hacia su Padre.
Además, este libro está escrito con el estilo pasional del hijo atravesado por el dolor de la lectura de los cuatro libros tradicionales evangélicos: ¡casi todo lo que hay en ellos no tiene nada que ver con Él! Por mucho que brillen en algunos versos los momentos de analogía entre el Cristo bíblico y Él, cuanto más es su similitud, mayor es la diferencia.
¡EL PADRE NO OBRA EL MAL! ¡Ni tampoco los hijos que aman al Bondadoso Padre obran el mal! Aquí está el punto de infl exión de la revolucionaria y espiritual recuperación de la visión clara, a la que Juan de San Grial llama la segunda conversión. ¿Acaso puede el Padre curar a sus hijos enfermos con un mal superior? Aparentemente, diluvios del cielo, plagas de langostas en los campos, sequías, incendios, terremotos, tsunamis, enfermedades, tiranos y déspotas, accidentes de centrales nucleares, toda la muerte en la Tierra, juicios y eternos sufrimientos en el inframundo, son “el mal divino pedagógico”. El anciano espiritual ortodoxo de la película ‘La isla’, que es sin duda un santo divino según el guión, también dice que la muerte no le asusta pero teme el encuentro con el Señor (“y los hombres píos apenas se salvan”).
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